Restringen el uso de redes y definen cupos diarios para la pesca recreativa en el Miño

Restringen el uso de redes y definen cupos diarios para la pesca recreativa en el Miño

La temporada de pesca para el año 2021 inaugurará nuevas normas de gestión de los recursos en el Tramo Internacional del Río Miño destinadas a proteger las especies fluviales de interés preferentes. En total son 31 medidas, entre las que destacan la creación de un coto internacional de pesca recreativa de salmón; la restricción del uso del trasmallo en la desembocadura del Miño y de la red de cabeceira; la unificación de cupos de trucha y reo y la fijación de un cupo para salmón, saboga y sábalo. También se propone la unificación de cuotas y tallas mínimas para la trucha en los afluentes gallegos y portugueses, entre otras medidas.

En concreto, se establecen vedas para el uso de redes de trasmallo, cañas, biturón y cabeceira, reduciendo el período hábil de pesca. En este sentido, la restricción del uso del trasmallo consiste en limitar el acceso de embarcaciones en la desembocadura, establecer corredores biológicos que aseguren la movilidad de las especies e incluir un período de veda en su uso a partir del 15 de abril. Por su parte, sobre la red de cabecera, se acortarán los períodos de actividad y jornadas de pesca.

También se definen por primera vez los cupos y tamaños en el ejercicio de la pesca recreativa para el salmón, el reo, la trucha, el sábalo y la saboga. La pesca de salmones y sábalos se restringe a un ejemplar por pescador y día; la de reo y trucha a ocho unidades, también por pescador y día; y la saboga a cinco, con esa misma condición.

En el caso de la pesca en embarcación, se duplican los cupos, excepto para el salmón, que no registra cambios. Por otro lado, se unifica la talla mínima para la pesca de reo y trucha en 25 centímetros.

Es la primera vez que se establece una base consensuada para la gestión de los recursos pesqueros en el Tramo Internacional del Río Miño. Para ello, se elaboró una propuesta en el marco del proyecto de cooperación transfronterizo POCTEP Migramiño, liderado por la Xunta desde 2017 y financiado con fondos europeos. Parte de estas medidas fueron estudiadas y aprobadas por la Comisión Permanente Internacional del Miño para su ordenanza de pesca 2021. Además, se prevé que el año próximo también se apliquen en los afluentes pontevedreses del río Miño.

El documento, en el que se recogen estas medidas de gestión comunes para la pesca fluvial en el TIRM y sus afluentes, se desarrolló contando con la opinión de las administraciones con competencias en la gestión de la pesca fluvial, expertos científicos y también entidades representantes de colectivos de pescadores de Galicia y Norte de Portugal.

Fuente: Faro de Vigo